En un entorno cambiante, la adaptación es imprescindible para salir adelante. En el caso de las empresas, la transformación digital del negocio se ha convertido en una respuesta prácticamente inevitable a esta situación. Tanto es así, que un informe de Google sitúa a España como uno de los países que mejor ha capitalizado el aumento del comercio electrónico que causó la pandemia, con un crecimiento del 41% en las ventas.
¿Cómo acometer el necesario proceso de transformación cuando los cambios se suceden a una velocidad estratosférica? ¿Es posible realmente poner al día el negocio si cada día hay un cambio nuevo?
En este contexto vertiginoso, los negocios necesitan la ayuda de herramientas que les permitan no solo adaptar sus estrategias y procesos a un entorno cada vez más digital, sino también sacar el máximo partido de su potencial. La inteligencia artificial es una de las más potentes y transversales. De hecho, puede convertirse en la clave del éxito de la transformación digital de las empresas.
Globant, unicornio nacido en Argentina, hoy multinacional tecnológica cotizada en NYSE con una valuación en torno a USD 9B. También es una de esas empresas que se dedican a acompañar a otras en una transformación digital integral. Les enseñan, entre otras cuestiones, a sacar el máximo partido de la inteligencia artificial. Una herramienta que Globant utiliza para producir tecnología capaz de resolver retos de negocio.
Federico Pienovi, su CBO para la región EMEA, lo tiene claro: “las empresas necesitan dotarse de capacidades que les den conocimiento y músculo para poder reinventar sus negocios, sus experiencias de usuario, redefinir procesos, evolucionar sus pesados legados tecnológicos… Necesitan crear esa ventaja competitiva que les permita liderar sus industrias y continuar siendo relevantes para sus clientes”.
Se trata de que las empresas sean capaces de redefinir e impulsar toda su cadena de valor. Es lo que desde Globant definen como “Augmented Organizations” u “Organizaciones Aumentadas”, en las cuales la inteligencia artificial tiene un papel fundamental para alcanzar esa transformación integral.
Tal vez uno de los errores más habituales entre las empresas que acometen un proceso de digitalización consiste en reducir ese cambio a lo que aparece en una pantalla. La experiencia digital del cliente no puede, en este caso, limitarse solo a una interfaz visual sencilla o a reducir el número de pasos necesarios para completar un proceso.
En realidad, se trata de generar una relación más estrecha con el cliente en todos los canales sin importar cuál elijan para acceder a los productos o servicios que ofrece la marca. También de que esa relación sea personalizada al milímetro y que se adapte a las necesidades específicas de ese cliente.
“Para tener una experiencia digital líder, las empresas necesitan continuar invirtiendo en tecnología y atacar el problema de forma completa”, enfatiza Pienovi. Este esfuerzo abarca, según el experto, desde la actualización o migración de los sistemas legados a sistemas cloud native que permitan una gran escalabilidad, hasta la estrategia de datos de la empresa. Ellos constituyen la base sobre la que se montarán todas las estrategias de personalización de experiencia y sobre la que se sustentarán nuevos modelos de negocio.
A partir de ahí, se trata de seguir subiendo las distintas capas de tecnología que conforman una app o servicio hasta alcanzar finalmente los canales o productos digitales. Esta sería la clave para definir una experiencia única.
Entre los ámbitos de transformación de una organización, donde la inteligencia artificial tiene mucho que decir, destaca el de la sostenibilidad. Una cuestión que se ha vuelto cada vez más estratégica para las organizaciones, dado el peso específico que ha ganado en los últimos tiempos para cuestiones tan importante como la captación de inversores o de talento.
En este sentido, Globant ofrece un producto específico a las organizaciones, denominado Sustainability Studio. Combina tecnología digital y sostenibilidad para ayudar a las organizaciones a adoptar un enfoque de resolución de problemas basado en la Agenda 2030 para alcanzar una operación empresarial verdaderamente responsable.
“La inteligencia artificial ayuda, en primer lugar, como acelerador de cualquier medida de sostenibilidad basada en datos, KPI o estándares. En general, la inteligencia artificial nos facilita la identificación de tendencias. Lo hace tanto en innovación como en la predicción para el desarrollo en finanzas sostenibles, el desarrollo de modelos climáticos o incluso en cuestiones de respuesta social a estrategias”, indica Pienovi.
Una parte imprescindible de la transformación de una empresa tiene que ver con la creación y expansión de una cultura propia, que el talento debe interiorizar. La gestión de los recursos humanos y los equipos cobra así más importancia que nunca.
Esta es una cuestión que, cuando se mezcla con el uso de inteligencia artificial, puede resultar conflictiva, pero que si se gestiona adecuadamente puede ofrecer importantes ventajas a una compañía. En Globant, donde trabajan más de 17.250 profesionales en 18 países, ya han podido comprobarlo
“Desde que dio comienzo la compañía, desarrollamos un sistema operativo para la organización —denominado StarmeUp— que incentiva a nuestros empleados a interactuar, enviar feedback y reconocimientos de manera digital”, detalla Federico Pienovi. El objeto de estas interacciones consiste en determinar cómo se tejen las relaciones en la empresa, tanto entre empleados como entre oficinas y equipos.
En este punto, la inteligencia artificial permite a Globant y a las empresas que ya utilizan StarmeUp predecir situaciones que, de otro modo, serían difíciles de captar en empresas cuyo tamaño dificulta conocer la situación de cada empleado en tiempo real. “Esto permite identificar cuándo empleados pierden o cambian su forma de interactuar con sus compañeros, permitiéndonos intervenir de manera proactiva para mejorar la situación de cada uno de nuestros empleados”, añade Pienovi.
Otro de los puntos sensibles de la relación entre inteligencia artificial y talento es la posible asunción de tareas que hasta ahora realizaban humanos. En este punto, la clave consiste en observar a la tecnología como aliada, más que como una amenaza. Lejos de destruir empleo, la inteligencia artificial puede servir para aumentar las capacidades de un empleado.
“La clave es llevar nuestras capacidades a donde realmente somos buenos y aprovechar lo positivo de esta tecnología, que en ningún caso sustituye a la inteligencia humana”, defiende Federico Pienovi.
Como consecuencia de este enfoque, la inteligencia artificial en las empresas ayuda a trasladar a las personas a tareas de mayor valor añadido. Los trabajos manuales, repetitivos y de bajo valor quedan, de esta manera, en manos de procesos robotizados que, además, cuentan con tasas de fallo muy inferiores.
Para Pienovi se trata, en definitiva, de pensar en la IA “como una herramienta que puede aumentar tus capacidades, proponer nuevas soluciones, nuevos servicios y elevarte en el valor que vas a dar a la organización como empleado y como agente de cambio para el bien”.
Con este panorama, ¿cómo serán los lugares de trabajo del futuro? Desde Globant apuestan, en primer lugar, por la diversidad. Una diversidad que será necesario gestionar de manera eficiente.
“La oficina del futuro es diversa, en todo su significado. Es un lugar donde la diversidad se ve y se vive”, augura Federico Pienovi. Se trata de una diversidad poliédrica, que afectará a los lugares, los roles, las culturas, las tecnologías y las distintas personalidades del talento. “La oficina del futuro tiene más forma de ecosistema que de oficina. Un ecosistema diverso, orgánico y aumentado”, abunda el experto.
¿Y cómo se gestiona una realidad tan compleja? En Globant han apostado por lo que se conoce como Studios, centros donde se mezcla el conocimiento tecnológico específico con equipos multidisciplinares ágiles.
“Esta organización por Studios es una gran ventaja competitiva”, destaca Pienovi. “Ya tenemos 27 distribuidos en los países donde operamos y cada año agregamos alguno nuevo respondiendo a las necesidades de conocimiento que genera el mercado. Los Studios son los que contienen el conocimiento de Globant. Cuando tenemos que hacer un proyecto, combinamos varios de estos equipos. En una dinámica tecnológica tan rápida, si no tienes la flexibilidad que te dan estos Studios, pierdes la relevancia”, explica.
La transformación digital de las empresas debe concebirse como un proceso global que alcance los aspectos más diversos. De esta manera, se convertirá en el camino del éxito fiable y seguro que toda compañía aspira a emprender.