Aschrafes uno de los casi 2.000 menores que entraron en Ceuta en la última crisis migratoria. Sin embargo, su icónica imagen entrando a nado con un improvisado flotador ha dado la vuelta al mundo después de haber sido socorrido por el ejército español y devuelto a Marruecos a través de la frontera en la playa de El Tarajal. Ahora, la Justicia debe dirimir si esa entrega se produjo fue forzada y, por tanto, ilegal.
Su caso es uno de los muchos que estudia la Fiscalía, que trata de averiguar si se produjo la devolución en caliente de menores no acompañados cuando cerca de 10.000 personas migrantes entraron en Ceuta. De todos ellos, 8.000 fueron devueltos de facto según entraban en España si se demostraba su mayoría de edad.
Por otra parte, hay más de 1.100 menores que siguen en Ceuta a la espera de que se resuelva su situación. La ciudad autónoma ya ha manifestado que se encuentra desbordada mientras que el Rey de Marruecos ha dado instrucciones para que todos los menores no acompañados que hayan entrado ilegalmente en la Unión Europea sean readmitidos en el país magrebí.
Riduan y Aiman, dos niños que duermen en las calles de Ceuta: "No queremos volver a Marruecos" EBBABA HAMEIDA (Enviada especial de RTVE a Ceuta)En el caso de que el inmigrante sea menor de edad o no se pueda determinar cuántos años tiene, no puede ser devuelto en caliente según la legislación española además de ser contraria a la protección de la infancia recogida por la Organización de las Naciones Unidas. Sin embargo, Aschraf regresó a Marruecos aunque él no quería.
Un equipo de TVE ha podido entrevistar a este menor de 16 años en Marruecos. Vive en una barriada a las afueras de Casablanca con su tercera madre. Aschraf explica cómo fue abandonado al poco de nacer cuando su joven madre biológica renunció a cuidarle.
El Gobierno acuerda con las comunidades la acogida de 200 menores migrantes procedentes de CeutaEn ese punto, otra mujer se hizo cargo de su manutención y educación aunque falleció al poco tiempo, quedándose sin familia de nuevo. Ya con su tercera madre, la actual, ha intentado cruzar a España en tres ocasiones porque "allí hay trabajo, hay futuro", según relata Aschraf, que dejó la escuela a los nueve años.
En febrero, Aschraf abandonó su humilde casa con techo de uralita para ir a trabajar a un desguace con el que sacar algo de dinero en su viaje a Europa. No avisó a su madre de sus intenciones. Este menor marroquí pasó cuatro meses compartiendo piso con otras cuatro personas hasta que se quedó sin dinero. De ahí, se tuvo que ir a la calle hasta que saliera una oportunidad para ir a España.
Cuando Aschraf escuchó que la gente estaba entrando en España por la playa de El Tarajal, decidió probar suerte una vez más. Con un cinturón y varias botellas de plástico enganchadas entre ellas Aschraf fabricó un flotador con el que entrar a nado a Ceuta, esquivando la valla por el espolón.
La Fiscalía abre investigación sobre las devoluciones en caliente de menores en Ceuta"Empecé a llorar porque casi alcanzo mi sueño de empezar una nueva vida en Europa", ha explicado este joven marroquí de 16 años. "Pero no lo conseguí", concluye Aschref, que fue devuelto contra su voluntad, según explica.
"Me han devuelto a la fuerza, la policía española me dijo que no me preocupara, que estaba en tierra española y que me iban a proteger", ha lamentado este joven marroquí conocedor de que la ley no permite que en casos como el suyo sean devueltos a Marruecos.
Ahora, una ONG marroquí ha prometido ayudas económicas para el alquiler con su familia y para que prosiga sus estudios. Mientras la Fiscalía decide su caso y el de otros menores, Aschraf mantiene su empeño en llegar a España y cumplir su sueño de una nueva vida en Europa.
El Gobierno de Ceuta se ha mostrado agradecido de que el Estado vaya a colaborar en la atención a los menores inmigrantes ya que la situación de la ciudad está "desbordada" desde el pasado 17 de mayo. El portavoz del Gobierno local, Alberto Gaitán, ha afirmado que ha pedido "auxilio" a la Administración General del Estado "porque no tenemos capacidad para acoger a estos menores".
Gaitán ha expresado su deseo de que este asunto se pueda resolver "en breve" al señalar que si con 250 menores ya se desbordaba la capacidad de acogida "peor con los 1.159 que tenemos actualmente". De ellos, 253 viven en el albergue provisional de Piniers, otros 214 en el polideportivo cubierto de Santa Amelia, otros 242 menores en el denominado "Tarajal II", otros 146 más en el "Tarajal I" y otros 31 permanecen aislados en otra nave por haber dado positivo coronavirus. A estos hay que añadir los 273 menores marroquíes que están tutelados por la ciudad y que residen en el centro de realojo de La Esperanza.